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martes, 5 de febrero de 2013

La estrella del viento



Ella pidió un deseo, tener alguien con quien jugar y que nunca, NUNCA, se fuera... las estrellas no conceden deseos a cualquiera, pero a veces, algunos sueños se hacen realidad...una noche, su deseo se concedió y una estrella bajó, el era su secreto especial, fue muy divertido por un tiempo, pero después parecía que faltaba algo... ni los abrazos, ni los besos, ni las reprimendas, llenaban su corazón, la niña estaba creciendo, necesitaba pasión; un día ellas aparecieron y comenzaban a ocupar la atención de su estrella...

¿Quién la amaría ahora a ella? y al cielo miró, lo deseó con todas sus fuerzas y su deseo se concedió.. el sueño se volvió realidad y con eso su estrella desapareció; a los pocos años ella se desvaneció, su deseo era un espejismo a pesar de ser real, al abandonarla el deseo ella poco a poco dejó de desear, comenzó a enfermar, ya no había sueños, ya no tenía a su estrella, todo comenzó a desvanecerse hasta que no quedara nada...ni siquiera ella...

Entonces la estrella comenzó de nuevo a brillar, con sus manos la niña la volvió atrapar, era la estrella del viento que le regaló lluvias de plata, lluvias de estrella, estrellas fugaces que alegraban su andar; pero también le lanzó algunos meteoritos que sin querer la golpeaban duramente, cosas del universo, accidentes o parte de su inocencia o inconsciencia....a pesar de eso ella se alejaba de su gran estrella, sin embargo no lo ha podido dejar...
A veces, en las noches obscuras, cuando las estrellas son brillantes, se escucha el eco de la voz del viento ... Por favor, no te vayas.



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